Reflexiones sobre los clásicos: Rousseau

C:\Documents and Settings\OEM\Configuración local\Archivos temporales de Internet\Content.MSO\WordWebPagePreview\Rousseau_Mónica.htm

martes, 16 de noviembre de 2010

Miriam

El Contrato Social de Jean-Jacques Rousseau González Montalvo Miriam-023 En primera instancia hay que recordar un poco de la vida del autor de El contrato social Jean-Jacques Rousseau, quien nació en el año 1712 en Ginebra. El autor sufre primeramente la muerte de su madre, después su padre se tiene que ir y es puesto en la casa de los Lambercier. Durante varios años va huyendo de los país de donde es expulsado, por su diversas obras, tiene una vida amorosa apasionante pero asimismo frustrada. Por lo tanto Rousseau tiene una vida bastante polémica lo cual le sirve para escribir sus obras. En especial en la obra mencionada anteriormente en la cual critica la administración de distintos gobiernos. Ahora bien dentro del libro, Rousseau menciona algo que define toda su obra, ya que al abordar los temas lo hace, acercándose más al hombre como es y no como debería. Anteriormente habíamos visto con Platón y un poco con Aristóteles que abordaban sus temas como lo que debería ser. Es muy difícil imponer o sugerir leyes a los hombres, ya que tienen muy arraigadas sus tradiciones que no pueden cambiarse de un día para otro, se necesita un proceso muy largo para adaptarse a nuevas leyes. La primera máxima de Rousseau dice que los hombres nacen libres pero no viven así, al contrario, al emplearse la fuerza y obedecer, se pierde la libertad por la cual fue creado. Sin embargo esto no quiere decir que estén siempre dependientes a otros, sino que se obtiene una cierta libertad al llegar a una convención. En lo particular creo que ya se ha mencionado anteriormente con Locke que cada persona posee cierta libertad, pero que no es absoluta ya que existen personas a nuestra alrededor que rompen con la libertad al ejercer sus derechos. Sin duda este autor lo menciona de manera más concreta, y refiriéndose al poder que ejercerse uno sobre otros. La primera sociedad que nace es la familia, ya que busca una administración legítima. La familia une al padre y al hijo por amor, y también por la fuerza. El autor relaciona el origen del estado con la familia, ya que el padre de familia es como el jefe de gobierno. El padre ejerce poder sobre sus hijos, los cuales una vez que ya hayan obtenido lo que necesitan, pueden alejarse de su padre sin más, y si continuaran con ella sería por voluntad. La esclavitud puede darse en cuanto una persona se apropia de sus derechos, pero esto no quiere decir que se vea obligado a obedecer. Entonces se origina la guerra, porque es el resultado de la pretensión de la esclavitud. Es por esto, que la guerra sólo puede darse entre estado y estado; y no como hombres o como ciudadanos que son enemigos accidentales y van en contra de la naturaleza. La guerra y las diferencias que surgen en la sociedad no pueden mantenerse todo el tiempo, así se forma una convención para poder vivir en armonía. A esta convención Rousseau lo llama contrato social. En el cual se forma una asociación que defienda y proteja con fuerza a la persona y sus propiedades, obedeciendo para obtener la libertad. El resultado de esta asociación es la voluntad general. El pacto social considera pueblo, a los miembros hablando colectivamente; ciudadanos cuando participan en la autoridad soberana; y súbditos a los que están sometidos a las leyes. En esta parte el autor me resuelve una duda que tenía desde Aristóteles, pues los ciudadanos son los que tienen una intervención más directa con la política del Estado. La asociación implica el compromiso con el Estado, el cual da como resultado el cuerpo político o soberano, el que da legitimidad al contrato. Entonces cuando se pasa del estado natural al estado civil, se alcanza la libertad civil y la propiedad. Algo que me llamó la atención es que la libertad se obtiene al obedecer las leyes, y claro está, se respetaran tus derechos. Asimismo me gusta como la soberanía es el poder que tiene la voluntad general para cambiar lo que no corresponda a sus intereses, donde todos lo que pertenecemos a este contrato podemos participar. Si supiéramos un poco de esto, a la población mexicana no le daría miedo de exigir sus derechos y quitar a los gobernantes incumplidos. La soberanía es inalienable porque nuca deberá enajenarse, y el poder se puede trasmitir más no la voluntad. Pareciera que en este país estamos todos de acuerdo con la forma en la que se gobierna, pues no hacemos nada por oponernos a este, pues como dice Rousseau el silencio general es el consentimiento del pueblo. Sin embargo yo pienso que el pueblo no dice nada, porque no está seguro del poder que tiene, no sabe cómo hacer el cambio, y si a esto le sumamos que los gobernantes han presionado de tal manera que hasta al momento el pueblo no ha tenido la necesidad de rebelase. La soberanía es indivisible, pues se constituye de la ley. Lo más interesante es que dice: la ley no siempre es unánime, pero que se invita a todos a votar sin exclusiones y que sean conscientes. En México estamos invitados a votar pero no tenemos el consentimiento de las leyes que eligen para nosotros. Las leyes son los registros de nuestras voluntades, y es significativo decir que si una ley está mal hecha causara muchos problemas, como en México las leyes no se respetan y se reforman cuando se les ocurre, por los intereses de los particulares. Bien dice Rousseau que los particulares son diferentes a los de la voluntad general y no deben meterse en esos asuntos. Dentro de las mismas leyes menciona la muerte como defensa propia, cuando no hay manera de juzgar al criminal, también nos dice de las leyes civiles, deben servir para conservar al Estado, y todo esto tomando en cuenta las costumbres del pueblo. El gobierno define Rousseau, como un cuerpo intermedio entre los súbditos y el soberano para su comunicación, encargado de la ejecución de las leyes y el mantenimiento de la libertad civil y política. También entiende al gobierno como la suprema administración. Una frase que me gusta muchísimo es que los miembros de este cuerpo son los magistrados, simples funcionarios al servicio de la voluntad general. Me encantaría ir con algunos funcionarios y decirles: oye tu eres un empleado como cualquier otro, no puedes llegar y tratarme como a un plebeyo y creerte la gran cosa, pues de los impuestos yo te estoy pagando para que hagas tu trabajo. En el cuerpo político es observa a dos poderes el ejecutivo y el legislativo. Dentro del poder ejecutivo está la administración pública, y el legislativo es el que establecer las leyes, a pesar de que existen estos dos poderes es necesario el Tribunado para regular a los otros dos poderes, y conservar las leyes y a veces para proteger a los soberanos del gobierno. Como podemos observar el tribunado de nuestra nación no sirve, porque se violan nuestros derechos, no regula los poderes y es indiferente. Otro punto que no está previsto dentro del cuerpo político son los diputados o representantes. Estos surgen cuando los habitantes del estado ya no se presentan a las asambleas y prefieren que otros vayan por ellos. Una forma de regular el poder sobre el Estado es el número de miembros de cada poder, esta es una aportación muy importante ya que en el gobierno hay mucha gente que ocupa un lugar de más, sin realizar un bien público. Como por ejemplo toda la bola de diputados y senadores en México que están disfrutando de privilegios que ellos mismos se prestan y no hacen nada por el país. El gobierno es por lo tanto un medio para servirnos y que este no puede limitar a la voluntad general, la cual en México está destruida. El contrato es únicamente con el Estado, y no tenemos por qué subordinarnos al gobierno, al contrario es el que está subordinado a nosotros. La voluntad general es indestructible, y relacionándolo con el capitalismo, entiendo porque nos ha vuelto ambiciosos, consumidores y en tener más el otro, pues dice Rousseau que los hombres entre más rectos y sencillos, son difíciles de engañar por su misma sencillez. Pues nada le podrá seducir y pensaran mejor. El sufragio es una de las parte que más me llamo la atención, pues cuando se llama al pueblo a votar antes de todo esto es una propaganda terrible que engaña a las personas. Proponía que se estuviera informado antes de votar, pero si a eso se le agrega los que dice Rousseau que a la población de repente se le convoque a votar, sería más difícil que engañen o envuelvan a la gente en sus mentiras. Estaría muy bien que se aplicara en México para ver que concepción tienen las personas en este momento del presidente, que continuara o que se fuera. El Estado según Rousseau es preferible que sea pequeño y no grande, pues como ya ha dicho Maquiavelo se tiene mejor control de este. El autor menciona los tipos de gobiernos como la democracia en un Estado chico pero sin duda es imposible porque los muchos no pueden gobernar a los pocos, con esto mi idea de democracia ya está descartada para cualquier país en la que se quiera emplear. La monarquía es preferible en un Estado grande para que el Rey se pueda abastecer de los tributos del pueblo. La aristocracia la cual la ve como el gobierno de los más poderosos. También nos habla un poco de la tiranía. Sin embargo lo que es más relevante para mí, es que, como ya han mencionado otros autores: el gobierno es conforme a los ciudadanos y costumbres, que sea capaz de prever lo que su población necesite. Mi idea de gobierno es ahora más concreta y diferente a lo que pensaba para mi país, como porqué México mejor no es una monarquía, o una democracia y un gobierno socialista. Es por eso que es necesario un estudio en el cual el gobierno se adapte a nosotros para vivir en armonía. La censura es buena siempre y cuando se utilice para conservar las tradiciones, en fin para el bien del pueblo. Además de que algo que ya desaparición no puede volver a restaurarse, pues es regresar al pasado y quedarnos estancados. Tal es el caso de la Iglesia que en México siempre quiere volver al pasado, cuando ha puesto infinitas trabas para no progresar y censura lo que no le convenga. Por lo tanto la religión del Estado debe ser la que brinde tolerancia y que no se oponga a él, pero a su vez espiritual para el hombre. Es una de las grandes aportaciones de Rousseau pues este tema siempre causa confusión, pero es mejor la religión que se encuentre la persona y no que sea impuesta por el Estado. En conclusión me gusto este libro a pesar de que no le entendía. Al revisarlo de nueva cuenta, me di percate de su pensamiento más realista, abarcando los aspectos del Estado. Lo que más me intereso fue lo de la voluntad general, la administración pública y el voto. Asimismo cómo Rousseau retoma a otros autores y los señala en su libro citando sus pensamientos. También me gusto cuando analiza un poco la situación de los romanos y el mismo menciona que no le cabe en la cabeza que no se haya retomado su forma de gobernar y en sí la vida tan admirable que llevaban. Bibliografía: ROUSSEAU, Jean-Jaques, El Contrato Social, editorial Éxodo, México, 2007.

No hay comentarios:

Publicar un comentario